LA DESVERGÜENZA DE MADURO
La fotografía de Nicolás Maduro en Turquía, almorzando en uno de los restaurante de carne más caros de Estambul , fumándose un habano y con un reloj de oro en la muñeca, es una muestra más de degeneración moral, e intelectual de un dictador, personaje corrosivo y corrupto.
Alguien, aunque sea con la fuerza, debe de parar al régimen de Venezuela, una autentica maquina de dolor, hambre y desesperación.
Maduro, debe de ser llevado junto con otros dirigentes a un Tribunal Internacional, para que sea juzgado de los gravísimos delitos de los que se le acusa.
Debe de investigarse, también, la supuesta relación del régimen con el narcotráfico y bloquearse los cientos de millones de dólares que importantes dirigentes tienen en el exterior.
Aquellos, como Rodríguez Zapatero que justifiquen en cualquier cosa a este régimen de terror, contribuyen directa o indirectamente a su legitimación.
Mientras los venezolanos sufren y mueren por hambre, Nicolás Maduro y Cilia disfrutando de uno de los restaurantes más costoso del mundo, todo esto a costa del dinero robado al pueblo venezolano. pic.twitter.com/ScRZHAsYYM
— Julio Borges (@JulioBorges) 17 de septiembre de 2018