NO ES SÓLO CUESTIÓN DE SIGLAS
Se habla mucho de regenerar los partidos políticos, se dan formulas mágicas, que son un brindis al sol.
Lo que hay que regenerar es a la sociedad; el problema de fondo no es cuestión exclusivamente de siglas; sino de personas y valores en una sociedad que da culto al dinero y al poder, además de estar bastante desorientada y sin horizontes.
Lo estamos viendo en las nuevas fuerzas políticas a izquierda y derecha, decían venir a regenerar y ahora resulta que también en mayor o menor forma tiene casos de corrupción y algunos comportamientos poco ejemplares.
Tenemos que darnos cuenta, que hay personas con valores y con buenas intenciones en todas las fuerzas políticas, pero también hay personas que dejan mucho que desear y no es cuestión de siglas ni de idearios.
Por otro lado España y Europa en general están a falta de líderes con credibilidad ética y moral que ilusionen y que marquen líneas claras hacia el bien común, preservando la libertad.
Por lo tanto ninguna fuerza política está al cien por cien libre de personas que actúan por su cuenta y que al final perjudican a su partido y a la sociedad en general.